1. Aguas
El abastecimiento de agua a la ciudad de Las Palmas procedía antiguamente del barranco del Guiniguada a través de un complejo sistema de canalizaciones abiertas y acueductos cubiertos que fueron evolucionando a lo largo del tiempo desde Fuente Morales (1792) hasta las diferentes fuentes construidas en Vegueta y Triana como el pilar de Santo Domingo, el pilar Espíritu Santo o el pilar Nuevo.
Hasta el risco de San Nicolás, al margen del pilar creado en 1890, llegaba una importante acequia que luego se bifurcaba en dos. Una, se destinaba a regar los huertos cercanos y otra se dirigía al Castillo de la Mata. En el trayecto, la infraestructura también era utilizada como espacio para la colada.
Justamente en la calle Álamo vivían multitud de lavanderas, junto a una acequia que en esta zona se conocía como "acequia de las negras", porque a ella acudían a lavar las trabajadoras de las casas pudientes de la zona.
Instalación efímera
La instalación busca la activación de la plaza y su memoria evocando el recuerdo de las lavanderas vinculadas a la acequia ya desaparecida y al pilar, hoy sin agua.
Alrededor de la fuente, se establece un diálogo con los elementos existentes disponiendo varias estructuras de cuerdas de sisal que funcionan a tracción mediante contrapesos de piedra y recipientes con agua. Sobre estos conjuntos se tenderán sábanas humedecidas proponiendo cada día una relectura del espacio público con la ayuda de la participación ciudadana.
La intervención efímera se va transformando durante los tres días del festival, activando mediante sábanas blancas la memoria y el espacio con el frescor de la tela humedecida. Mismos elementos con un resultado distinto, como si del agua del Guiniguada se tratase, que pasa por el mismo sitio pero nunca igual.
AGUAS es una intervención efímera realizada por los alumnos de la EALPGC Lía Sánchez y Enrique Viera guiada por los profesores Sergio Rodríguez, Salas Mendoza y Fran Pazos. La obra dialoga con las presencias, memorias, músicas y sabores desplegadas en este lugar.